skip to main  |
      skip to sidebar
- Cada día que pasa creo en menos cosas y el matrimonio es una de ellas.No es algo nuevo ya que cualquier impositivo social me ha dado sarpullido desde mi más tierna juventud.
 
- La falsedad y la hipocresía inundan muchas ceremonias  en las que una pareja de enamorados se declaran amor eterno frente a un juez o frente a un Dios,que en muchos casos es ignorado si no vilipendiado por uno o ambos contrayentes.Esa farsa me dá asco.
 
- Pero también hay ceremonias sinceras,donde prevalece el amor y la amistad frente a las apariencias,donde la asistencia no obliga a llevar chaqué para los señores ni tocado para las señoras o donde un plato de patatas con chorizo supera con creces al mejor canapé.
 
- Tengo una pareja maravillosa que me lleva soportando desde los 17 años y si algún día tenemos que casarnos me gustaría que fuese  una ceremonia sencilla y sincera,sin ataduras ni protocolos,sin dioses ni demonios.Con la presencia de la gente a la que queremos .